viernes, 16 de mayo de 2014

Los buitres del Valle del Rudrón también son calvos. Buitre leonado (Gyps fulvus)

El buitre leonado está muy presente en el Valle del Rudrón, debido a los abundantes acantilados de la zona, y ha sido el ave elegida en el logo del Parque Natural de las Hoces Ebro-Rudrón. Pero lo que nos ha llamado la atención, y es algo en lo que no  habíamos caído es que "todos los buitres son  calvos".

Logo Parque Natural Hoces Ebro-Rudron

 Y la explicación es sencilla: los buitres se alimentan de animales muertos, metiendo la cabeza dentro de los cadáveres para arrancar trozos de carne. Si tuvieran plumas en la cabeza se les ensuciarían tanto que no se podría limpiar. Por eso, lo práctico ha sido mantener esta característica, es decir, quedarse calvo.

Buitre en el Valle del Rudrón. Ilustración  por Gelosoi.
Otra peculiaridad del buitre (Gyps fulvus), es su incapacidad de levantar el vuelo cuando come mucho. 
Normalmente aprovechan  las corrientes de aire, que al  calentarse, ascienden, y ayudan los buitres a reducir su gasto de energía y elevarse, siempre y cuando no se lo impida su estómago lleno de comida.

Es a través de su vista, y no de su olfato, la forma de localizar los cadáveres (zorro, jabalíes, conejos, ovejas, reptiles...). Utilizarán sus poderosos picos para romper huesos y rasgar las pieles más duras.

Cuando un buitre ha localizado un cadáver, se deja caer con las patas hacia adelante, señal que es interpretada por el resto como un aviso de comida.

Esperamos que los buitres nos acompañen durante muchos años en el Rudrón, reincorporando a la cadena trófica esos cadáveres que de no ser por ellos quedarían abandonados.

Para saber más: Cuadernos de Campo del Dr. Félix Rodríguez de la Fuente

No hay comentarios:

Publicar un comentario